El tamarindo es un árbol cuyo tamaño puede llegar a los 20 metros, aunque generalmente es de crecimiento lento. Sobre todo la particularidad de este árbol es la forma de sus frutos, donde en su interior se albergan las semillas. Son una especie de bolsas de color marrón, cubiertas y de gran tamaño, que tiene varios usos culinarios. Por ejemplo se suelen vender como dulce o para la fabricación de zumos y bebidas, e incluso se han hallado algunas propiedades medicinales.
Mejor clima para el tamarindo
El tamarindo logra sus mejores desarrollos y crecimiento en zonas de climas cálidos, con inviernos secos y suaves. Las plantas jóvenes y poco leñosas suelen ser bastante susceptibles al frío, por lo que si esperamos un invierno frío habrá que protegerlas.
Propiedades del tamarindo
La pulpa del tamarindo posee una gran variedad de vitaminas y minerales, como: ácido ascórbico, ácido tartárico, hierro, magnesio, tiamina, betacarotenos, fósforo, potasio, vitamina C, calcio, etc. También es rica en carbohidratos, grasas, proteínas, fibras, y flavonoides.
Cultivo
Este árbol tolera muy bien las épocas de sequía pero requiere de riego para su buen crecimiento.